El pasado 27 de mayo tuvo lugar el Acto de Nombramiento de Capellán de Honor de la Orden de Montesa, Rvdo. D. Jose Luis Sanchez Garcia, quien celebró una solemne Misa, acompañado por el Capítulo de la Orden de Montesa y Ordenes Militares hermanas, presidido por el Lugarteniente General de la Orden de Montesa el Excmo. Sr. Frey D. Rafael de la Brena y Sanchiz.
El arzobispo de Valencia, Monseñor Carlos Osoro, presidió la ceremonia de nombramiento como Capellán Honorario de la Orden de Montesa del sacerdote valenciano D. Jose Luis Sanchez Garcia.
La eucaristía se celebró en la iglesia de Santa María de Montesa del Temple, ubicada en la plaza del Temple, número 2 de Valencia.
Durante la celebración, Jose Luis Sánchez, Vicerrector de Extensión Universitaria y Cultural y Capellán Mayor de la Universidad Católica de Valencia “San Vicente Mártir”, ha recibido las insignias de la Orden, que acreditan su nueva condición.
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Constituye un honor para mí, como XXII Lugarteniente General de la Orden de Montesa, hacer entrega del nombramiento de Capellán de Honor de la Orden, al Ilmo. Don José Luis Sánchez García, Sacerdote, Docente y Vicerrector de Extensión Universitaria y Cultural de la Universidad Católica “San Vicente Mártir”, de Valencia.
Desde la fundación de la Orden el 10 de julio de 1317, es notoria la integración en la Orden, en sus diversas formas, de los Eclesiásticos que han constituido el común de los Religiosos de la Orden de Montesa, a lo largo de los Siglos.
Ya desde 1653, tenemos noticia documentada del nombramiento de Capellanes de Honor por la Orden de Montesa. Siguiendo esta noble tradición y adaptándonos al día de hoy, la Orden quiere significar y realzar una vida dedicada a la formación religiosa y cultural de las personas, a través de su formación sacerdotal y de la docencia, dirigida muy especialmente hacia la juventud universitaria.
De todos, es conocida la trayectoria ejemplar y fecunda, que como sacerdote y docente, ha desarrollado y desarrolla Don José Luis Sánchez García, desde su Ordenación el 1 de septiembre de 1983, hasta nuestros días aquí en Valencia. Pero ahora quiero destacar en este momento, su aprecio intenso, desinteresado y profundo, hacia la Orden de Montesa, que nace en él, desde el primer día en que llega, como Rector de la Real Iglesia de Santa María de Montesa, llamada “El Temple” de Valencia y que perdura hasta el día de hoy, en que lo celebramos.
Durante esta etapa de su vida, al frente de los destinos de esta Iglesia, es cuando germina en él su interés, que pronto convierte en pasión, por la historia y la Orden de Montesa. Delante a diario, ha tenido en este templo, el testimonio y parte muy significativa de la historia moderna de la Orden.
Comenzó la construcción, del Palacio Convento e Iglesia, a partir del terremoto de 1748 que asoló el Castillo de Montesa. El entonces, a la sazón Rey de España, S.M. Carlos III, ordenó la construcción de un nuevo Convento e Iglesia en los terrenos, cerca del río, que ocupaba una antigua torre perteneciente a la extinguida Orden del Temple. De ahí el sobre nombre actual de nuestra Iglesia.
Es sede de la Orden durante muchos años, hasta la Desamortización, en que son obligados, los Freyles y Caballeros a marcharse. Pasa por periodos de inactividad, hasta que a finales del S. XIX, es ocupada por los frailes P.P. Redentoristas, que la abandonan en la década de los años ochenta del pasado S. XX. Aquí, en este punto, es cuando D. José Luis se hizo cargo de la Iglesia y de la atención a las personas que conviven a su alrededor y forman la feligresía. Al mismo tiempo, D. José Luis simultanea su labor parroquial, con su proyección docente y universitaria.
La Orden de Montesa, que tuvo contacto y relación con el P.P. Redentoristas, en concreto con el P. Faus, último Rector y autor de un interesante libro a cerca de la historia de la construcción del Convento e Iglesia, no quiso perder su relación con la que siempre, desde el S. XVIII ha considerado su casa en Valencia; por ello, nos pusimos en contacto con D. José Luis y se produjo el encuentro; Encontramos a una persona profundamente religiosa, abierta, culta, interesada y comprometida; con la que surge, una fluida relación, entre las personas que componen la Orden y el propio D. José Luis; la cual desemboca en una profunda amistad que nos lleva a plantear un análisis profundo y exhaustivo de la situación actual de las Ordenes Militares. Nuestros puntos de vista son coincidentes y generosamente ofrece toda su ayuda para intentar resolverlos.
Durante esos años, se celebran, en esta esplendida Iglesia, varios Capítulos de la Orden de Montesa y del Real Consejo de las Ordenes Militares; entre los que cabe destacar, el celebrado bajo la Presidencia de S.A.R. Don Juan de Borbón, Presidente del Real Consejo, el día 14 de octubre de 1989 y el de Cruzamientos, que con posterioridad tuvo lugar, el 20 de mayo de 2000, bajo la Presidencia de S.A.R. Don Carlos de Borbón-Dos Sicilias, actual Presidente del Real Consejo de las Ordenes Militares.
Poco a poco, de la mano firme, inteligente y culta de D. José Luis, El Temple va recobrando su esplendor perdido, por el paso del tiempo y por los avatares de la historia. Consigue con fe, las aportaciones necesarias, fondos y subvenciones, privados y de Organismos Oficiales, para la restauración de diversos cuerpos de la Iglesia, así como, de innumerables obras de arte contenidas en ella. Siendo de destacar por su importancia, la restauración de la Sala Capitular en semicírculo, para uso y utilización por los Caballeros de la Orden de Montesa. Por todo ello, su paso como Rector de este templo ha dejado huella imborrable y que nosotros en este día queremos resaltar.
Es nuestro deseo y el suyo, llenar de fecundo contenido espiritual, esta figura de Capellán de Honor y hacer llegar, a los Caballeros de Montesa y los de las otras Órdenes Militares hermanas, toda el testimonio y sentimiento de una profunda renovación que nos demanda la Iglesia y la sociedad.
Las Ordenes Militares son Instituciones, cuyo origen se remonta a los siglos XII y XIV en el caso concreto de Montesa, y que nacen con una profunda y clara vocación religiosa y de servicio a la Iglesia y a la Corona de los Reinos de España. Tienen por objeto, desde su fundación, alabar a Dios y servirle en el combate de la fe, ante las dificultades y amenazas de la época en que se vive, dando respuesta adecuada, mediante una moral y espiritualidad ejemplares, al servicio del bien común, de la sociedad, de la Iglesia, de la Patria y de la familia, valores que constituyen la secular tradición de las Ordenes Militares españolas de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.
En esta tarea estamos y nos consta, que contamos con todo el apoyo y adecuado consejo, que nos pueda proporcionar la experiencia de D. José Luis y que le agradecemos sinceramente, por su importancia.
Quiero así mismo y para terminar, dar las más sinceras gracias a todas personas, que como Uds. apoyan y creen, que es posible concertar la Historia con la vida actual, tanto social como cultural y espiritual.
Gracias D. José Luis, por todo este enorme testimonio de fe que nos has dado, en nombre de la Orden de Santa María de Montesa y San Jorge de Alfama y en el mío propio.
» Orden de Montesa.
