de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.
Orígenes:
El principio claro del Real Consejo de las Órdenes es incierto. No se conoce un documento fundacional, si bien se tiene certeza de que existía ya a principios del S. XVI. Es a partir de 1523, cuando las Órdenes de Santiago, Calatrava y Alcántara quedaron incorporadas definitivamente a la Corona de Castilla, cuando el Consejo de Ordenes quedó consolidado.
Funciones:
El Real Consejo desde sus comienzos por un lado trataba los asuntos espirituales de las Órdenes, y por otro lado actuaba en nombre del Rey como Administrador Perpetuo a quien representaba. Las atribuciones del Consejo eran: tratar los asuntos de gracia y patronato real, los asuntos de gobierno, la administración de justicia; y la admisión de Caballeros y Religiosos. Con el paso del tiempo la institución se transformó, pasando a ser fundamentalmente un órgano de calificación, control y representación de la nobleza española.
Fines Actuales:
El Real Consejo de las Ordenes Militares tiene los mismos fines que siempre han tenido estas, la Santificación Personal, el Culto Divino y la Defensa de la Fe, añadiéndose además los fines Histórico-Cultural y Benéfico-Social.
Entre otras funciones organiza los actos religiosos en común de las cuatro Ordenes, se encarga de labores administrativas e institucionales; ejerce el patronato de sus fundaciones, y despacha las solicitudes de pretendientes a hábitos de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa.
Con casi cinco siglos de historia, el Real Consejo de las Ordenes de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa, tiene una vocación eminentemente Católica, organiza retiros espirituales, celebra las festividades más señaladas, concede becas a seminarios y presta asistencia a los Conventos de Madres Comendadoras de Santiago y Calatrava.
Desde la constitución del «Priorato de las Ordenes Militares» en 1875 (Bula «Ad Apostolicam» de Pio IX), el Obispo Prior de las cuatro Ordenes Militares, nombrado por su Santidad el Papa, es quien asume los derechos y obligaciones que le son inherentes al cargo. Monseñor Gerardo Melgar Viciosa, Obispo de Ciudad Real, es el actual Prior de las cuatro Ordenes Militares por nombramiento pontificio (Bula Papal) de 8 de Abril de 2016.
Anualmente en la festividad del Corpus Christi, S.A.R. D. Pedro, Presidente del Real Consejo, hace entrega al Obispo-Prior de cuatro becas destinadas al Seminario de Ciudad Real.
Uno de los pilares ideológicos del Real Consejo es la fidelidad hacia la Corona Española, como fuente de convivencia y signo de identidad, entre los españoles a lo largo de su historia, siendo actualmente S.M. el Rey Don Felipe VI el Gran Maestre y Administrador Perpetuo de las cuatro Ordenes.
La tradicional vocación militar del Consejo, hoy en día, queda patentemente reflejada con el Hermanamiento con la Guardia Real y con acuerdos de colaboración con el Instituto de Historia y Cultura Militar.
Como fin asistencial se ostenta el patronato de las fundaciones Real Hospital de Santiago y Lux Hispaniarum.
En el ámbito cultural realiza congresos y ciclos de conferencias sobre la Órdenes. En los últimos años ha efectuado convenios de colaboración con el Instituto de Estudios Manchegos de Ciudad Real y con la fundación Patrimonio Benéfico Marques de Dos Aguas de Valencia, editando diversas publicaciones.
El Real Consejo custodia y aumenta su archivo y biblioteca, contribuyendo a crear una nueva fuente documental para futuros historiadores. También con vistas a conservar el patrimonio monumental relacionado con las Ordenes Militares se esfuerza en conseguir ayudas públicas y privadas para su restauración y mantenimiento.
Finalmente como nota característica hay que destacar que mantiene vivo el patrimonio espiritual e histórico heredado de nuestros mayores, conservando y dando mayor esplendor a la nobleza española.