» Real Consejo de las Ordenes Militares » Antecedentes históricos
A principios del siglo XVII, la situación bélica en España la podemos sintetizar, como en un enorme esfuerzo que se ha de ejercer en la defensa de todo un Imperio.
Los Ejércitos se han ido transformando, con un gran desarrollo de las armas de fuego, y en Europa el Arma de Infantería Española es considerada como una de las más eficaces.
Este Ejército se hace cada vez más profesional, y al haber desaparecido las guerras con el Islam, nos encontramos con un declive, en el aspecto combatiente que tenían las Ordenes Militares como tales.
Estas mantienen su actividad, administrando sus posesiones y rentas. En el aspecto religioso continúan con sus conventos y monasterios, y debido a la Bula del casar, los caballeros se van integrando cada vez más en la sociedad dentro de su estado.
El espíritu de milicia que tenían las Ordenes se mantiene vivo, ya que muchos de sus caballeros ingresan en los Reales Ejércitos sirviendo como Oficiales, como prueba de ello basta con visitar nuestros principales museos como el del Prado, el del Ejército o el Naval y contemplar a ilustres militares y marinos, con las veneras de su orden en el pecho de sus uniformes.
En altos cargos de responsabilidad para el Estado, los Reyes siempre otorgaron su confianza, a Caballeros de las Ordenes Militares. El Descubrimiento del Nuevo Mundo supone el inicio de una serie de nombramientos para su gobierno y administración, que comienzan con el relevo de Cristóbal Colón en Indias en la persona del Comendador de Calatrava Don Francisco de Bobadilla, si bien es cierto que su actuación no resulta afortunada, cuando surgen problemas difíciles, los Reyes Católicos designan Gobernador de Nueva España, al Comendador de Lares de la Orden de Alcántara Frey Nicolás de Ovando. La Real provisión es dada en Granada el 3 de septiembre de 1501.
Estos serán los primeros jalones que van a mostrar a través de tres siglos la presencia de caballeros de las Ordenes en la Historia de España en América.
Para ello debe bastarnos con repasar la lista de los Virreyes de Nueva España y la del Perú, así como los Jefes militares que desarrollaron su carrera militar en América.
La Caballería Española de los Borbones mantiene el espíritu de las Ordenes Militares y así con la reforma que emprende el Rey Don Felipe V, en 1706 se crea el Regimiento de Santiago y el de Calatrava, en 1715 se funda el de Ordenes nuevo, cuyo primer Coronel es el Duque de Aveyro y que en 1715 se refunde con el de Montesa. En 1718 se establece el de Alcántara.
A estos Regimientos han pertenecido numerosos oficiales que profesaron en las Ordenes, costumbre que se extendió por las diferentes Armas y Cuerpos.